lunes, 31 de mayo de 2021

 Qué industria tenemos y qué vamos a hacer con ella

 

Que la transformación verde de la industria no nos conduzca al paro, la miseria y la precariedad para los trabajadores


Desde hace unos meses, un grupo de camaradas del PCE en Aragón hemos estado dándole vueltas al problema de la industria en nuestra región y estamos preparando una campaña sobre el tema. No se nos ha ocurrido gracias a nuestra originalidad sino porque en el debate público se puede encontrar interés y preocupación por el tema. Sin duda la falta de respiradores, mascarillas y más recientemente vacunas ha hecho salir a la sociedad de su ensimismamiento, a lo que se le añaden los importantes conflictos por la pérdida de decenas de puestos de trabajo. Se está demostrando lo que muchos y muchas llevamos tiempo pensando: este modelo terciarizador y precario, basado en el turismo, los servicios, los bares y las tiendas, es frágil y no tiene futuro.


En los documentos del XX Congreso del PCE se definía Aragón como una región de monocultivo industrial y agroexportador. Sin duda la importancia de la industria automovilística en el Valle del Ebro es conocida en el conjunto del país y en los barrios de Zaragoza se tiene muy presente que la GM, la OPEL o la PSA, denominaciones que hacen referencia a la factoría de Figueruelas que genera 6.000 empleos directos, dan de comer. Frente a un 14% de PIB y de empleo que genera la industria en España, en Aragón es del 19% y del 20% respectivamente.
  

Después de décadas de utopía tecnológica, en la que parecía que las trabajadoras manuales iban a desaparecer y hasta parecía grosero hacer referencia a ello en el mundo mediático e intelectual, esta idea poco a poco va cambiando debido a la crisis social y sanitaria. Nos preocupa que mientras empieza a calar la idea de que la industria es esencial en nuestra región lo que veamos sea lo contrario. Muchos son los ejemplos una vez superada la crisis de 2008. Megasider, 120 despidos. Future Pipe, 116 despidos. Schindler, 119 despidos. Alumalsa, 180 despidos. Y el cierre de la térmica de Andorra con su impacto sobre la comarca. Hay más de un centenar de despidos planteados en FerroAtlántica en Monzón.

Pero vamos a afinar el análisis. No solo son los despidos lo preocupante en el sector. Frente a una visión idílica e idealizada del sector industrial, y frente a que objetivamente tenga unas mejores condiciones que otros sectores, está siendo precarizado. La temporalidad es una constante. Como ejemplo valga que, después de camarero, el contrato más firmado es de operario industrial y esto no quiere decir que se esté agrandando el sector sino que la temporalidad es muy notable. También es algo patente que es la juventud quien rellena estos contratos.

Otro de los grandes hachazos a las condiciones de los trabajadores de Aragón ha sido el último convenio de PSA. Un convenio firmado a la baja, con presiones brutales a la plantilla, amenazándola con el cierre, y con llamadas del mismísimo presidente de Aragón, Javier Lamban, a los representantes sindicales para que hicieran campaña por el Sí. El resultado fue muy apretado y se dice que los propios delegados sindicales fueron a las mesas al turno de mañana porque en el turno de noche, el que primero empezó a votar, estaba ganando el No. El resultado es una planta con un convenio muy por debajo del anterior, con tres escalas salariales (en el mismo puesto de trabajo tres trabajadores pueden estar cobrando tres salarios distintos con la misma categoría) y con los sábados metidos como día laborables. Si destacamos este caso es por el peso que tiene el convenio de PSA para arrastrar las condiciones de trabajo de todo el sector del automóvil (más de 20.000 trabajadores) y también de gran parte de la clase trabajadora de la región. Ya se sabe, oferta y demanda en el mercado laboral.

No toda la industria está desapareciendo. La logística y el sector de la carne, los macromataderos, están creciendo. Pero la apuesta por estos dos modelos tiene sus inconvenientes. Por un lado la logística está ligada al enorme aumento de las mercancías, de la producción descontrolada para vender más y obtener mayores beneficios. Es una consecuencia directa del capitalismo acelerado que no puede parar. De todas formas, es un sector en desarrollo muy relacionado con la industria, por lo obvio y por las condiciones similares de grandes centros de trabajo. Sin duda la sociedad deberá analizar y criticar para bien y para mal el desarrollo que este sector está teniendo en Aragón, especialmente en Zaragoza. De momento aterrizado sobre la corrupción del caso PLAZA.

Por otro lado el sector cárnico está cobrando una gran importancia en zonas rurales y viene acompañado de una gran precariedad, inestabilidad y explotación sobre los trabajadores. La mayoría de estos trabajadores son personas migrantes, muchas con condiciones de falsos autónomos, sometidas a una gran intensidad psicológica y física en el trabajo. Además el sector de la carne se está vendiendo como una de las soluciones para el desarrollo rural, obviando las condiciones sociales que acarrea por su modelo de explotación laboral y los graves problemas ecológicos ligados a las emisiones de CO2 y problemas de purines para las aguas de las zonas afectadas. Debemos frenar la despoblación, sí, pero no a cualquier costo.

Sin embargo, no defendemos la industria desde una posición idealizada del obrero de mono azul que hará inevitablemente la revolución. Los que venimos del mundo industrial sabemos cuán alejada está esta visión de la realidad. Lo que sí podemos afirmar es que nos estamos dando cuenta de que los territorios más industrializados han soportado mejor la crisis de la pandemia y en general los territorios más industrializados son los que menores tasas de paro y mayores salarios medios tienen. Y esto no es una casualidad, el mayor valor añadido que genera la industria, aunque pueda variar bastante por sectores, da un mayor margen de maniobra a la negociación sindical. No nos engañemos, hay mejores condiciones porque se arrastran las victorias y el nivel de sindicalización de los 70s y 80s.

Que la transformación verde no nos conduzca al paro y a la precariedad

En un futuro lleno de incertidumbre en el que previsiblemente se den guerras económicas entre las grandes potencias por el reparto de los mercados, preferimos que los bienes importantes se fabriquen en casa. Y no solo estamos hablando de materiales esenciales en el mundo actual: acero, aluminio (recordemos que está pasando con ALCOA), componentes electrónicos, elementos químicos, productos agroindustriales... Y se podrían citar otros muchos que son esenciales para la vida cotidiana y que no pueden depender de la voluntad del mercado, es decir, de la voluntad de los grandes capitales.

Mientras se retocaba este artículo, la planta de PSA está parada por falta de chips. Además en el sector industrial faltan materiales, esencialmente acero, aluminio y plástico cuyo principal proveedor es China. Hasta desde la patronal se reconoce que el problema del aluminio viene derivado del cierre de ALCOA.

Mención aparte merece la energía. Siendo claros, concisos, breves y yendo al grano, si queremos un país soberano, que pueda realizar políticas favorables para la mayoría social, necesitamos tener soberanía energética. Y si queremos un futuro como clase y como especie, necesitamos una transformación verde. Ahora bien, que no se nos olvide lo que sucedió en este país la última vez que hubo una gran trasformación industrial, llamada reconversión y que más bien fue una desindustrialización. Que la transformación verde de la industria no nos conduzca al paro, la miseria y la precariedad para los trabajadores.

Otro de los grandes problemas a los que nos enfrentamos como región, también como país, es la despoblación rural. Frente a soluciones que plantean otros problemas como la industria de macromataderos, debemos plantear una distribución planificada desde el Estado de la industria que se expanda de una forma equilibrada y decididamente sobre el territorio. Solo con una reindustrialización podremos parar la sangría poblacional en el medio rural.

Y sin duda todos estos cambios, la modernización y las variaciones necesarias, no serán posibles sin el papel activo de los trabajadores a través del Estado y de una gestión democrática y pública de las cuestiones estratégicas para el país, como el desarrollo industrial y la energía. Y también a través de un sindicalismo activo y combativo. No nos servirá de nada a nuestra clase que se realice una robotización y modernización de carácter ecológico si esta cae sobre las espaldas de la clase obrera, es decir, si se reduce el sueldo, si se precarizan los calendarios y aumentan las jornadas. Por ello, la primera e inmediata tarea para lograr los objetivos que aquí se marcan es la mayor organización de los trabajadores y del movimiento obrero en su conjunto, o sea, de las asambleas de trabajadores, de los sindicatos y del partido de la clase trabajadora, nuestro partido. Si no conseguimos reforzar las estructuras de clase para que se realice una transición justa, no lo será. Los beneficios irán a parar a manos privadas, seguirán los desequilibrios territoriales y el capital seguirá encontrando grietas para mantener el beneficio a costa de la salud del planeta. También se perpetuán las problemáticas ya existentes. A nadie se le escapa que la industria es un sector mayoritariamente masculino y masculinizado. Y el sindicalismo y los y las comunistas tenemos nuestro papel especial que jugar en este tema. Tampoco nos olvidamos del debate público necesario en torno a la inserción de los jóvenes en el mundo laboral. ¿Será a través de una FP dual, con prácticas o sin prácticas, remuneradas o no?

Desde el núcleo de industria del PCE-Aragón hacemos un llamamiento al conjunto de la clase trabajadora aragonesa para que comprenda que esta no es una problemática del sector sino que es una prioridad para toda la clase y para el conjunto del país. Al resto de camaradas y amigos que hayan leído y compartan estas reflexiones les invitamos a que se pongan manos a la obra en el sindicato, en el centro de trabajo y en el partido para debatir las cuestiones estratégicas e importantes y que nuestras preocupaciones se antepongan a las noticias y debates superfluos y vacuos. Y que nuestras tareas vayan dirigidas a la raíz de los problemas con la precisión resultante de un correcto, firme y meditado análisis.

  VÍCTOR  SERGIO BENEDICO GÜELLSecretario Político del Núcleo de Industria del PCE en Aragón 

martes, 25 de mayo de 2021

 La masacre de Palestina y la inexorable degeneración de Israel

 

Debemos reconocer que lo ocurrido a lo largo de estos once días de mayo en Gaza no es nuevo. Es el cuarto asalto militar israelí sobre la Franja de Gaza desde que el enclave fue sometido a un bloqueo en 2007 y considerado un territorio hostil. Esta vez nos han llegado imágenes más impactantes que en otras ocasiones y ha habido menos víctimas, como gusta al público que lo ve desde lejos. En el lado palestino, la crisis se salda con más de dos centenares de civiles muertos, miles de heridos, centenares de edificios e instalaciones básicas arrasados. Un destrozo que hunde a Gaza aún más en la miseria. En el lado israelí ha habido una docena de muertos, decenas de heridos y algunos daños materiales, más que en ocasiones anteriores pero sin comparación con lo que ha encajado Gaza. Con una novedad, ha vuelto esa olvidada sensación de poder ser víctima de un proyectil de los desharrapados de la Franja.

De nuevo Israel ha hecho gala de su superioridad tecnológica militar, tanto defensiva como ofensiva, alimentando el gustillo de los militaristas y desalmados que desde lejos glorifican a un Estado que ha normalizado la masacre de civiles. Pero por mucho que haya recibido el espaldarazo de muchos gobiernos amigos, apoyando su derecho a defenderse ante la agresión de Hamás, ha cargado con un vastísimo rechazo internacional. Su imagen ha bajado unos cuantos peldaños. Indudablemente esto le duele pero es soportable.

Gaza ha quedado aún más maltrecha y malherida. Hace tiempo que es un lugar inhabitable, sin apenas recursos y dependiente de la ayuda exterior. Hoy lo es mucho más. Ya no disponemos de calificativos aplicables a esta situación. ¿Cómo se debe nombrar a un enclave donde se retiene a dos millones de personas que no sólo no es apto para vivir sino que se hace aún más invivible con esta destrucción? Pronto se hará balance de daños y la comunidad internacional convocará la enésima conferencia de donantes para la reconstrucción y la asistencia a la población. Un ejercicio necesario pero que puede tornarse en perverso si no se acompaña de medidas políticas para cambiar de una vez por todas la situación. Pero este último episodio de violencia pone en evidencia algunas claves de la cuestión palestina y qué puede ocurrir ahora.

CUESTIÓN CLAVE DE LA AGENDA INTERNACIONAL

La primera es que la crisis de mayo ha desbaratado el discurso dominante desde las revueltas árabes de 2011 de que la cuestión palestina había pasado a segundo plano y que no importaba a las sociedades árabes o a nivel internacional. Este discurso no era tanto fruto de un análisis objetivo sino una descarada voluntad de encubrimiento: poner la mira en Siria, Irán o en la reconfiguración de alianzas regionales permitía a Israel seguir profundizando la ocupación con total impunidad. Los aprendices geopolitólogos rápidamente se convirtieron en portavoces de este discurso. Sin embargo, el castillo de naipes se ha desmoronado. En estos días han tenido lugar vastas movilizaciones populares, no sólo en los países árabes sino en las cuatro esquinas del mundo. Los mensajes oficiales se han visto arrollados por la información alternativa a través de las redes sociales. Muchos analistas críticos han subido el tono de sus valoraciones. La crítica anticolonial ha ganado una relevancia nunca vista. Palestina se ha impuesto de nuevo como una cuestión clave de la agenda regional e internacional.

La segunda es que la crisis ha recordado que la cuestión palestina tiene varias dimensiones imbricadas y conectadas, incluye los territorios ocupados de Cisjordania y Gaza, las comunidades de refugiados en los países vecinos y los palestinos dentro de Israel y en la diáspora. Los prolegómenos de la crisis tuvieron lugar en Sheikh Jarrah, un barrio de Jerusalén, se extendieron a la Ciudad Vieja, de ahí a las comunidades palestinas dentro de Israel y finalmente a Gaza. Incluso se movilizaron las poblaciones de los países vecinos con asaltos a las vallas en las fronteras con Jordania y Líbano. La represión recayó sobre todos. Pero la respuesta también ha sido unitaria. El 18 de mayo tuvo lugar una huelga general que paró Cisjordania, Jerusalén y el sector árabe en Israel. Una acción unitaria palestina sin precedentes que confronta la estrategia israelí de fragmentar a los palestinos.

La crisis de mayo deja una grave secuela dentro de Israel. Ha profundizado la principal brecha existente en Israel, la que separa a judíos y palestinos con ciudadanía israelí. Recordemos que un quinto de la población israelí es palestina desde el punto de vista étnico y nacional y siempre ha sido considerada un cuerpo extraño, ajena al ethos nacional y sometida a discriminación institucionalizada. La represión contra las manifestaciones de estos palestinos ha llegado a niveles nunca vistos en numerosas ciudades mixtas y pueblos árabes. Especialmente llamativas fueron las ratonnades y los saqueos a manos de radicales sionistas y de colonos desplazados desde Hebrón que además contaron con la protección de la policía. Esta violencia intraisraelí e intercomunitaria y el afloramiento de brutales muestras de racismo asestan un golpe definitivo a la supuesta democracia israelí, difícil de restañar y que tendrá sin lugar a dudas consecuencias definitivas.

Independientemente de la oportunidad y efectividad política de la respuesta de la resistencia armada palestina en Gaza, Hamas y Yihad Islámica han sorprendido a todos con su tenacidad y crecida capacidad de fuego. Israel no se esperaba que con las restricciones del bloqueo hubieran acumulado tal arsenal y que sus mejoras técnicas les permitieran bombardear los grandes núcleos urbanos israelíes. Esta cuestión vuelve a poner sobre la mesa el debate sobre la estrategia palestina, sea privilegiando la estatalidad o recuperando la dimensión de movimiento de liberación nacional de la OLP. Los palestinos tienen ante si una necesidad inminente de reconfigurar su movimiento y definir una estrategia nacional que se ha visto profundamente debilitada desde el Proceso de Oslo y a lo largo de estos últimos años.

LA ARROGANCIA Y LA INSOLENCIA

La crisis llama también la atención a la comunidad internacional, tanto a Naciones Unidas como a los países más implicados y a los Estados de la región, así como a la Unión Europea, sobre cómo construir de manera multilateral un marco de resolución del conflicto. La quimera de Oslo lleva muerta varios años. Quedó patente que sólo sirvió para desresponsabilizar al ocupante israelí y permitirle profundizar la ocupación. Se ha olvidado el absurdo Plan de Trump-Kushner (el llamado acuerdo del siglo, presentado en enero de 2020) que partía de la premisa de la rendición absoluta de los palestinos y consistía en construir un nuevo orden regional basado en la economía en manos de Israel. Los recientes acuerdos de normalización de relaciones entre Israel y ciertos países árabes acogidos con alboroto, hoy se muestran como lo que realmente son: un mecanismo de apoyo mutuo entre regímenes impresentables o fruto de la extorsión. Esta normalización puede ser un serio problema para la estabilidad interna de algunos de estos países. Es hora por lo tanto de revisar si la idea original de resolver el conflicto mediante la estatalidad palestina (la solución de dos Estados) es suficiente o no, o si hay que incluir la descolonización y la democratización como elementos de la ecuación.

Finalmente, la crisis de mayo ha puesto en evidencia la realidad israelí, su deriva iliberal en los últimos años se ha tornado en agresividad y brutalidad en estado sumo. La fuerza militar de choque no se ha abatido sólo sobre Gaza, su intención ha sido aterrorizar, con todos los medios disponibles, a todos los palestinos allí donde estuvieran, incluso dentro de Israel. Esto nos hace pensar que a veces la demostración desmesurada de poder, el vértigo del dominio, encubre en realidad una debilidad. Aunque Israel alardee de desarrollo económico y tecnológico, y de una gestión eficiente de la pandemia, las cosas no le van nada bien. Ha tenido cuatro elecciones en dos años y la última ha dado lugar al Parlamento con más ultras y extremistas en la historia del país. Hoy incluso los sionistas liberales -que tan buena acogida tienen en Europa- consideran que la deriva del país en los últimos quince años ha pervertido el proyecto original y que se corre el peligro de arruinarlo de manera definitiva, dando lugar a un monstruo peligroso para su población, sus vecinos y el orden internacional. Cabe preguntarse si el proyecto sionista es remediable o corregible porque no hay colonialismos moderados, buenos o inocuos.

El gran especialista francés de la cuestión israelo-palestina Dominique Vidal utilizaba recientemente, con un extremo atino, el símil de la hibris para calificar la deriva del Estado de Israel. En la mitología griega antigua este término designaba la desmesura del orgullo y de la arrogancia, la insolencia, la transgresión de los límites impuestos por los dioses a los hombres. La hibris era un castigo de los dioses contra el hombre que ha perdido la consciencia del lugar que le corresponde en el universo o en la sociedad. Un proverbio griego rezaba que «aquel a quien los dioses quieren destruir, primero lo vuelven loco». Desde su creación, a Israel se le ha consentido actuar fuera de las normas. Hoy Israel, tanto su gobierno como gran parte de su sociedad, están sumidos en una espiral de degradación, de violencia y de irracionalidad que quizás augure cambios radicales en la situación de Oriente Medio y el fin del Estado colonial. El alto el fuego entre Hamas e Israel es bienvenido pero eso no significa paz. La paz requiere mucho más: el fin de la ocupación, el levantamiento del bloqueo a Gaza, una solución justa para los cinco millones de refugiados, el fin del apartheid en Israel y un Estado propio y soberano para los palestinos en su tierra.


ISAÍAS BARREÑADA 

Profesor de Relaciones Internacionales en la Universidad Complutense de Madrid. Coautor del libro Entre España y Palestina / Revisión crítica de unas relaciones. Catarata. 2018.

 

sábado, 22 de mayo de 2021

 Valoración de los resultados de las elecciones en Madrid

 

Las elecciones autonómicas en la Comunidad de Madrid celebradas ayer se han saldado con un pésimo resultado para las familias trabajadoras madrileñas y el conjunto de las fuerzas democráticas. El Partido Popular y Vox han logrado revalidar un nefasto gobierno cuyas señas de identidad son la corrupción, los recortes, las privatizaciones y, desde hace ya más de un año, una nefasta gestión de la pandemia. El triunfo de las posiciones trumpistas de Isabel Díaz Ayuso y de Vox supone una amenaza para la democracia, los derechos sociales y la convivencia.

En Izquierda Unida entendemos que desde hoy solo cabe un firme llamamiento a la movilización en defensa de la democracia y por la construcción de un proyecto alternativo capaz de generar confianza en la clase trabajadora y en los sectores populares en un momento de crisis e incertidumbre. Defender la democracia y construir un proyecto alternativo de mayorías son dos de las tareas principales que nos marcamos desde hoy y con este propósito llamamos de forma amplia a trabajar en positivo con las fuerzas políticas transformadoras, sociales y sindicales. La ciudadanía madrileña y la del conjunto del país merecen una reflexión colectiva, honesta y profunda para hacer de nuestro espacio político una herramienta más útil.
 

Unidas Podemos ha logrado tres escaños más en la Asamblea madrileña y mantiene, además, la presencia de dos compañeras de Izquierda Unida, Vanessa Lillo y Sol Sánchez, en el nuevo grupo parlamentario. Esta subida en apoyos y representantes no habría sido posible sin el compromiso de la militancia de Izquierda Unida y de Podemos, y sin la irrupción de la figura de Pablo Iglesias tras su renuncia a la vicepresidencia del Gobierno de coalición. Debemos poner en valor lo que supone esta subida de cerca de 80.000 votos y de tres escaños en un contexto extremadamente difícil por la general tendencia descendente, el débil posicionamiento de nuestro espacio en la Comunidad de Madrid y el acoso sin precedentes contra nuestra candidatura.

Los resultados no son buenos, pero sigue existiendo un espacio de izquierdas en torno al cual construir un proyecto con más solidez organizativa, territorial y social. Esto es posible gracias al trabajo constante y humilde de nuestra militancia, a la que debemos agradecer una vez más su entrega.

Como ratificamos en la XII Asamblea Federal, seguimos apostando por la unidad popular. Esta es una apuesta política que entiende la confluencia electoral como la expresión última de una alianza política, social y cultural mucho más profunda. El fortalecimiento de Unidas Podemos en términos de profundización democrática, arraigo territorial y apertura social sigue siendo una necesidad imperiosa. Contra poderes fuertemente enraizados en nuestra sociedad no basta únicamente con la lucha en el frente institucional: debemos ser capaces de insertarnos en el conjunto de la sociedad civil y, en última instancia, en la cotidianidad de la clase trabajadora para disputar la batalla cultural por la hegemonía, siempre anclada en formas de vida y en múltiples espacios de socialización.

Nuestro país vive un momento difícil por las consecuencias de la pandemia y de la ofensiva reaccionaria. No hay tiempo para ningún lamento, sino para la reflexión y el trabajo colectivo. Seguro que estaremos a la altura del momento histórico, nos recuperaremos de este revés y empezaremos a construir desde hoy mismo las condiciones para conquistar los avances que necesitan las familias trabajadoras y nuestro país.

No podemos finalizar sin agradecer a Pablo Iglesias su compromiso con la gente trabajadora y su determinación contra las oligarquías políticas, económicas y mediáticas. No podría entenderse ningún acontecimiento político transcurrido en nuestro país durante los últimos años sin la importancia de su figura. La ruptura total del bipartidismo, la conformación del primer Gobierno de coalición desde la II República o la incansable denuncia de la profunda anormalidad democrática por la que atraviesa nuestro sistema político son algunos hitos que se asociarán a su trayectoria. Seguimos en la lucha.

 IZQUIERDA UNIDA FEDERAL  

jueves, 20 de mayo de 2021

Bancos, militares y políticos, los tres pilares del negocio de las armas en España


La banca española financió con 8.686 millones de dólares a las empresas de armas que suministran a la guerra en Yemen. Esa impunidad para vender armas con la autorización del Gobierno solo se explica por el fichaje de una treintena de altos cargos del Ejército y del Ministerio de Defensa como directivos de las principales empresas armamentísticas.


Según datos de ACNUR, en Yemen el 80% de la población necesita ayuda humanitaria para sobrevivir, hay cerca de 4 millones de desplazados internos y más de 7 millones de personas necesitan asistencia nutricional, incluidos 2,1 millones de niños y 1,2 millones de mujeres
embarazadas o lactantes que sufren desnutrición moderada o severa. Es por ello que algunas organizaciones como el Centre Delàs de Estudios por la Paz, con sede en Barcelona, ha documentado quién financia las empresas de armamento cuyo material militar es exportado a los principales países de la coalición que lidera esa guerra: Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos. Y ahí es donde aparece la banca española, con 8.686 millones de dólares destinados a 9 compañías que han fabricado armamento exportado a Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos: Airbus, Boeing, General Dynamics, Leonardo, Navantia, Raytheon Technologies, Rolls-Royce, Thales y Rheinmetall AG.

BBVA y Banco Santander son los bancos españoles que más financiación han destinado a las empresas de armas suministradoras de los principales ejércitos involucrados en la guerra en Yemen, con 5.231 millones de dólares durante el período 2015-2019.

El informe, hecho público el pasado 12 de abril con el título "Financiación de las armas de la guerra de Yemen", desvela mucha más información. Por ejemplo, que "durante el período 2015-2019, un total de 25 países de todo el mundo han realizado exportaciones de material militar a Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos. Estados Unidos es el país que encabeza la lista acaparando el 72,2% del total de las transacciones. Le siguen el conjunto de países de la Unión Europea, que representan el 21,9%".

Banca Armada

El Centro Delàs realiza desde hace años análisis sobre la relación entre los bancos y las empresas de armamento. Utilizan el concepto Banca Armada para referirse "a las entidades bancarias que están financiando y en consecuencia fortaleciendo la industria armamentística, una relación controvertida que puede darse de distintas formas, como es la participación accionarial, la financiación de las exportaciones, la emisión de bonos y pagarés, los fondos de inversión y la concesión de créditos y préstamos". Año tras año, amplían y actualizan su la Base de Datos Internacional de la Banca Armada con nueva información sobre la financiación de las principales empresas de armamento del mundo.

Este último informe ha permitido profundizar en el caso del conflicto armado en Yemen a través del análisis de qué bancos financian el armamento que se exporta a países vinculados con este conflicto. Para ello han realizado un análisis exhaustivo y amplio de todas las exportaciones mundiales realizadas desde 2015, año que se considera como el inicio del conflicto armado y 2019, año del que se dispone de los datos más recientes.

Según el Centre Delàs, 80 empresas de armas han exportado sus productos a Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos, de 15 las cuáles han podido disponer de datos sobre su financiación: Airbus, BAE Systems, Boeing, China Aerospace Science and Technology Corporation, General Dynamics, Leonardo, LIG Nex1, Lockheed Martin, Navantia, Norinco, Raytheon Technologies, Rheinmetall AG, Rolls-Royce, Textron y Thales Group.

El resultado es que las principales empresas suministradoras de armamento a los Ejércitos de Arabia Saudí y EAU han recibido entre 2015 y 2019, un total de 607.000 millones de dólares de cientos de entidades financieras, cuando han realizado acciones bélicas contra la población civil yemení.

Entre las 50 entidades que lideran el ránking de quienes han financiado a las empresas de armas de armamento, las que este centro para la paz denomina "la Banca Armada internacional", encontramos algunos de los principales bancos estadounidenses, como Black Rock, Goldman Sachs, Morgan Stanley y Citigroup, y bancos europeos como Deutsche Bank, Barclays, BNP Paribas, la aseguradora AXA, Unicredit, empresas públicas como la SEPI española o el Norwegian Government Pension Fund-Global y los dos grandes bancos españoles BBVA y Banco Santander.

El top cinco de este ránking de la financiación de la guerra lo conforman Capital Group, Vanguard, Black-Rock, State Street y Verishigt. Con 226 mil millones de dólares de financiación destinada a 12 de las 15 empresas estudiadas.

85.000 niños muertos

De modo que ese bloque político que se autodenomina "mundo libre", que sanciona países en nombre de la democracia y los derechos humanos, es el que acoge y rescata a los bancos que financian las armas que han llevado al hambre a siete millones de yemeníes y donde, según Save the Children, entre abril de 2015 y octubre de 2018 habrían fallecido 85.000 niños a causa de hambre y enfermedades.

Se da la circunstancia que la segunda y tercera entidad financiera que han financiado empresas de armas suministradoras de los principales ejércitos involucrados en la guerra en Yemen 2015-2019 han sido Vanguard (52.228.706.297,34 dólares) y BlackRock (47.994.161.101,63 dólares), los dos fondos de inversión que hace días señalábamos como principales accionistas y beneficiarios del negocio de las vacunas adquiridas por la Unión Europea y Estados Unidos.

En el caso español y en lo referente a exportaciones a Arabia Saudí, 2015 fue el año en que más ha exportado España, con un total de 545,8 millones de euros, a pesar de haberse iniciado ya el conflicto armado en Yemen. Aunque se produce un importante descenso en 2016 (sumando un total de 116,2 millones de euros), las exportaciones volvieron a repuntar en los años posteriores, alcanzando en el año 2017 un total de 270,1 millones de euros, disminuyendo tímidamente en 2018, siendo su valor de 235,2 millones y, finalmente, en 2019 con un total de 35,3 millones de euros. La venta de mayor importe fueron dos aviones de transporte militar y munición, por 190,5 millones, en 2018; pero la industria española también exportó a Arabia Saudí más tipos de armamento, como elementos para aviones, munición de artillería y bombas guiadas láser de aviación, entre otros.

En relación a Emiratos Árabes Unidos las exportaciones se muestran en cantidades sustancialmente menores si se compara con Arabia Saudí sumando un total de 276 millones de euros en todo el periodo. En lo que respecta a categorías militares, lo que más exportó España a Emiratos Árabes Unidos son aeronaves, vehículos aéreos no tripulados o drones. Durante ese periodo esta categoría alcanzó un total de 207 millones de euros en material exportado. La segunda categoría más exportada a Emiratos Árabes Unidos es la de municiones que asciende a 44 millones de euros.

En el año 2015 la cantidad de ventas a EAU asciende a 3,9 millones de euros, aumentando a 26,7 millones el año 2016. En cambio, en 2017 se duplica el total del valor del armamento, sumando un total de 52,9 millones de euros.

Precisamente, este incremento se debe a la adquisición por parte de EAU de bombas, torpedos y misiles con un valor de 15 millones. El año 2018 la cantidad total disminuyó dos tercios, representando un total de 13,8 millones de euros. Finalmente, en el año 2019, se produce el pico de ventas a Emiratos Árabes Unidos en comparación con los otros años, llegando a un total de 179,1 millones de euros con la venta de España de material perteneciente a las categorías de equipos electrónicos, tecnología y vehículos blindados.

El resultado es que, según Oxfam Intermon, desde 2015 a 2018 España ha facturado 1.672 millones (con otros 500 millones de 2019 ahora ya serían más de dos mil) en armas para la guerra de Yemen, mil veces más de lo que ha donado en ayuda humanitaria. España es el cuarto exportador mundial de armas a Arabia Saudí.

Una financiación española de 8.686 millones

El informe de Delàs señala que la financiación española a las empresas de armas no se limita al BBVA y Santander, también encontramos a otros actores de la banca española que les acompañan: Bankia, Banco Sabadell y Banco Mediolanum, con cuantías mucho más reducidas pero nada desdeñables, que además las relacionan con empresas líderes en la fabricación de todo tipo de armas y que son actores protagonistas del comercio de armamento mundial. En total, el conjunto de la Banca Armada Española ha canalizado hacia las empresas de armas de países exportadores a Arabia Saudí y EAU durante el conflicto en Yemen, 8.686 millones de dólares.
  
Todo este protagonismo de España en el mercado de venta de armas a países implicados en violaciones de derechos humanos y en sangrientos conflictos armados y, al mismo tiempo, el apoyo financiero de la banca española, requiere de la complicidad de altos políticos y militares. Y aquí viene el segundo descubrimiento. Una treintena de ex altos cargos de las Fuerzas Armadas españolas y del ministerio de Defensa pasaron a formar parte de los órganos de dirección de las principales empresas armamentísticas, cuyas operaciones en el exterior deben ser autorizadas previamente por parte del Estado. Es la conclusión a la que ha llegado el veterano investigador sobre los negocios del lobby militar español Pere Ortega, quien lleva ya varios años acumulando datos sobre esas puertas que conducen de la administración pública –principalmente en el área del ministerio de Defensa– a los consejos de administración de las empresas que desarrollan sus negocios en el sector militar.

Según sus investigaciones, al menos 23 militares que desempeñaron altos cargos en el área de Defensa dieron posteriormente el salto a la industria armamentística. En ese listado aparecen también los nombres de una quincena de políticos que también incluyen en sus respectivos currículums las dos funciones: desempeño de responsabilidades públicas en gobiernos y, antes o después, actividad en compañías del sector militar.

Militares y altos cargos en nómina de empresas de armamento

Ortega da alguno de esos nombres en el diario Público:

Fernando Alejandre Martínez, Jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD) hasta enero de 2020. Un año después, el Gobierno autorizó que fuese contratado por la empresa Sener Aeroespacial en calidad de "asesor". Esta compañía se encuentra entre las contratistas del ministerio de Defensa.

Salvador María Delgado Moreno, exjefe de Apoyo Logístico de la Armada, recibió unos meses antes la autorización pertinente para prestar funciones en la empresa Proyectos de Interés para la Defensa Argos, una compañía que trabaja en el sector de la innovación tecnológica de Defensa, Seguridad e Inteligencia.

El presidente del Consejo Asesor de Argos es Julián García Vargas, exministro de Defensa en el Gobierno de Felipe González. "García Vargas también estuvo al frente de TEDAE, la patronal de las empresas de armamento, entre 2009 y 2013, y formó parte de la asociación de la asociación USDAN, encargada de mediar en favor de los intereses de las industrias militares en exportaciones de armas frente a la Junta Interministerial Reguladora del Comercio Exterior de Material de Defensa y Doble Uso (JIMMDU)", explica Ortega. Esa Junta Interministerial es la encargada de conceder las licencias de exportación de armamento que solicitan las empresas.

Pedro Morenés ocupó distintos cargos públicos bajo los gobiernos del PP, y ha estado en los consejos de dirección de varias empresas armamentísticas. "Es conocida y está acreditada su vinculación con MBDA, un complejo empresarial dedicado a la fabricación de misiles". Morenés también ha estado vinculado a Expal, fabricante de misiles, o Instalaza, otra compañía de armamento.

Expal tiene como presidente a José Luis Urcelay, quien entre septiembre de 2018 y agosto de 2019 llegó a desempeñarse como Segundo Jefe de Estado Mayor de la Armada. En abril de 2020, el Gobierno autorizó oficialmente su incorporación en la multinacional Maxam, a la que pertenece Expal, para las tareas de "consultoría y asesoría". Un mes después se anunció su nombramiento como presidente de Expal en sustitución de otro militar, el almirante Francisco Torrente.

Eduardo Serra fue ministro de Defensa del PP. Hoy está al frente de Everis, una consultora que cuenta con una empresa dedicada al ámbito de la Defensa. De acuerdo a los datos suministrados por el Gobierno a través del Portal de Transparencia, Urcelay, ahora presidente de Expal, también fue autorizado a prestar servicios de "consultoría y asesoramiento" en Everis. Esta empresa cuenta con el 50% del capital de la compañía armamentística NTGS. En 2018, NTGS tuvo como principal cliente al ministerio del Interior de Arabia Saudí.

Con todos esos vínculos entre poder político y poder empresarial armamentístico se puede comprender la respuesta del gobierno a una pregunta del diputado de EH Bildu Jon Iñarritu al Gobierno pidiendo explicaciones sobre las razones del aumento de licencias concedidas para la exportación de armamento a Arabia Saudí en 2019, cuando se autorizaron 22 operaciones frente a las 4 permitidas en 2018. Según la respuesta del Gobierno español, Arabia Saudí y Emiratos Árabes no están sometidos a ningún embargo para la exportación de armas y las exportaciones españolas cumplen estrictamente la legislación y siguen las recomendaciones de la ONU.

(Tomado de Sputnik)

 PASCUAL SERRANO  

viernes, 14 de mayo de 2021

 COMUNICADO DE LA UP, PCC Y JUCO

 Por una Salida Democrática y Popular a la Crisis


A 10 días de iniciado el Paro Nacional, su continuidad y ampliación expresan un nuevo momento del acumulado de luchas sociales y políticas del pueblo colombiano.

Su protagonista principal son las juventudes junto a otras expresiones del movimiento de trabajadores, cívico, popular, étnico, campesino y democrático que no resisten más la arrogancia del mal gobierno de Iván Duque y el Uribismo. La movilización trasciende el rechazo a un proyecto puntual, y abarca la inconformidad con la orientación general del régimen político corrupto y violento que pretende mantener como si nada los privilegios de unos pocos. Todo el reconocimiento a este movimiento que ha logrado derrotar en las calles la reforma tributaria, la compra innecesaria de 24 aviones de combate, y obligó a la renuncia del nefasto ministro Alberto Carrasquilla.


Abogamos porque El Comando Nacional de Paro y los Comandos Departamentales reconozcan la realidad del movimiento de protesta y faciliten su ampliación mediante la participación de nuevas expresiones y liderazgos democráticos, especialmente jóvenes y mujeres, que emergen de la resistencia y la lucha popular en curso. La amplitud, la unidad, la movilización y la organización son premisas vitales para avanzar en la conquista de nuevas y más trascendentales victorias, y la derrota a las pretensiones divisionistas, provocaciones y saboteos de diverso tipo que promueve la Presidencia de la República.

Los 37(*) asesinatos y demás violaciones de derechos humanos documentadas que se han presentado en el marco del Paro Nacional no pueden quedar en la impunidad. Exigimos que cese inmediatamente la represión policial y militar, y se garanticen todas las medidas del orden nacional e internacional para que haya verdad, justicia y reparación. A las familias y comunidades que sufren los atropellos del terrorismo de Estado, en especial al ejemplar pueblo de Cali y el Valle del Cauca, nuestro permanente apoyo y solidaridad.

Denunciamos y rechazamos la utilización de la infiltración y otras modalidades de la guerra política y psicológica que vienen promoviendo los organismos de seguridad del Estado con el objetivo de provocar la violencia en las manifestaciones y desacreditar ante la ciudadanía en general el derecho constitucional a la legítima protesta que es masiva, pacífica y muy alegre mediante múltiples manifestaciones artísticas y culturales.
El desmonte del escuadrón de muerte que representa el ESMAD, así como la reforma estructural a la policía nacional son reivindicaciones hoy con mayor legitimidad ante las evidencias que demuestran la ilegalidad e inhumanidad de los actos de represión policial, que cuentan adicionalmente con la complicidad de la Fiscalía, la Procuraduría y la Defensoría del pueblo, plegadas vergonzosamente al servicio de la politiquería y a favor de la impunidad.

Respaldamos que para garantizar el acceso a servicios y bienes prioritarios a la población se faciliten todos los corredores humanitarios necesarios.

Saludamos todos los pronunciamientos que han solicitado respeto a la protesta social y rechazo a la represión estatal provenientes desde organismos internacionales como Naciones Unidas, gobiernos y otras instancias de carácter supraestatal, al igual que desde el movimiento de derechos humanos y organizaciones del campo social y político democrático.

Es muy importante que no se detenga esta labor de solidaridad permanente.
Contrario a los intereses continuistas y reaccionarios del Gobierno Nacional, el gran empresariado, el Centro Democrático, el Partido Conservador y otros partidos y sectores tradicionales, apoyamos y trabajamos por una Salida Democrática y Popular a la Crisis Nacional.

Esta orientación implica mantener y fortalecer la movilización y la protesta en campos y ciudades mediante el Paro y otras formas de intervención ciudadana de carácter amplio, unitario y democrático que obliguen al gobierno Duque a revocar las medidas anti populares denunciadas en el pliego de emergencia, entre ellas, la revocatoria al Proyecto de salud 010, la reforma tributaria del año 2019, la reforma laboral contenida en el decreto 1174 de 2020, la alternancia educativa sin condiciones, las fumigaciones con glifosato, entre otras medidas regresivas.

Asímismo reafirmamos la propuesta del VII Congreso de la UP a favor de un Plan de Emergencia Social que incluya por lo menos renta básica universal, subsidio a la nomina, matricula cero y apoyo a la pequeña y mediana empresa.

Urge que el gobierno nacional asuma cambios en el plan de vacunación, sumándose a las exigencias internacionales por el levantamiento de las patentes que ayude a salvar millones de vidas, y facilitando el ingreso de todas las vacunas disponibles que cumplan con la verificación necesaria, sin ningún tipo de sesgo político o ideológico.

Avanzar en un proceso diálogo y negociación con los representantes directos del movimiento popular, amerita el cese inmediato de la represión policial y la militarización, mediante la cuestionada figura de la “asistencia militar”.

Solicitamos a la Alcaldesa Mayor de Bogotá, así como a los demás Alcaldes y Gobernadores del país oponerse a esta medida arbitraria y hacer prevalecer la autoridad civil en contra de los llamados militaristas a favor de la violencia y la constitución de frentes paramilitares anti paro que ya son responsables de varios asesinatos y atentados en la ciudad de Pereira y Cali, que buscan justificar mayores recortes a las libertades y derechos, mediante la declaración del estado de conmoción interior, e incluso otras medidas de carácter golpista y dictatorial, con las cuales se trataría de favorecer el continuismo de derechas, y la suspensión o intervención en el proceso electoral del año 2022.

En este marco de disputas y avances en las resistencias y la lucha popular, la Unión Patriótica, el PCC y la JUCO, llamamos al conjunto del pueblo colombiano a construir y fortalecer en todos los municipios de Colombia escenarios de coordinación, cabildos o asambleas populares amplias y unitarias que permitan fortalecer la organización y la movilización social como parte esencial del proceso de construcción del PACTO HISTORICO, necesario para avanzar en un nuevo gobierno y una salida democrática y popular definitiva a la crisis.

¡VIVA EL PARO NACIONAL!

UNIÓN PATRIÓTICA
PARTIDO COMUNISTA COLOMBIANO
JUVENTUD COMUNISTA COOMBIANA

 PARTIDO COMUNISTA COLOMBIANO  

martes, 11 de mayo de 2021

 8 DE MAYO EN EL CEMENTERIO DE FUENCARRAL

 Homenaje a los españoles republicanos que lucharon contra el nazismo



Coincidiendo con la conmemoración de la victoria sobre el nazismo, la Asociación Descendientes del Exilio Español ha celebrado en el cementerio de Fuencarral un homenaje a los españoles republicanos por su contribución en la lucha contra el nazismo. Al acto han asistido representantes diplomáticos de México, República Checa, Francia, Rusia, Bielorrusia, el Presidente del Ateneo Español en México, el ex ministro de Defensa Julián García Vargas, y el actual Secretario de Estado de Memoria Democrática, Fernando Martínez López.

En el monumento erigido en 1995 en homenaje a los españoles que combatieron contra el nazismo, reza la placa: “En memoria de los españoles que combatieron por la libertad de Europa” ha pronunciado el discurso de apertura la presidenta de la Asociación de Descendientes del Exilio Español, Pilar Nova Melle:

“Sin ambages, sin falsas lecturas, aquí se recuerda a los exiliados republicanos, que nadie se llame a engaño en un momento en el que la sombra de la intolerancia emerge sobre los luchadores de la democracia. Partidos que quieren ocultar y, lo que es peor, negar, la gesta de las brigadas internacionales, de los soldados soviéticos en nuestro país. Todos ellos vinieron a defender lo que se estaba construyendo: educación, libertad, progreso. Y nuestros exiliados supieron agradecer y corresponder luchando en Europa, junto a ellos, por la misma causa: libertad y democracia. Su esfuerzo no fue vano: el nazismo fue derrotado. El pueblo español hundía sus raíces en el siglo de las luces y había sido cercenado, expulsado una vez más en la historia, como lo fueron los judíos o los liberales. Ahora eran los republicanos los que se veían obligados a abandonar el país por un golpe de Estado.

Aquellos expulsados, calificados por los vencedores de “antiespaña”, fueron auténticos patriotas. En sus largos años de exilio reforzaron la presencia de la cultura española en los países de acogida. En el exilio se crearon obras capitales de la literatura española del s. XX, así como en las bellas artes. Auténticos patriotas que en el camino del exilio perdieron todos sus enseres, pero no perdieron la tierra de España que portaban. Auténticos patriotas por las renuncias voluntarias realizadas al negarse a adquirir otra nacionalidad a cambio de perder la propia. Siempre fueron españoles. Que nadie ose calificar a los exiliados de “antiespaña”. Hoy la sociedad española no tiene una imagen bien fundada de cómo era la España de los años 30. Después de muchos años de olvido impuesto se intenta recordar, pero toda memoria es un esfuerzo, como afirmó un historiador francés, por comunicar nuestros recuerdos.

De izda. a dcha: María Sánchez Puig, filóloga, nacida en Rusia, junto a su marido, Manuel Arce Porres, médico, nacido en Oña (Burgos), quien salió al exilio como Niño de la Guerra con 8 años y perdió a su hermano en Leningrado. A su lado, Tomás Mansilla, médico, nacido en Moscú.

Se ha instaurado la equidistancia. Poner en el mismo nivel a los defensores de un régimen legalmente establecido y a los que actuaron para derribarlo por la fuerza de las armas es inmoral. Nosotros, sus hijos, nietos, los descendientes del exilio republicano, no lo vamos a permitir. Y recordaremos a la sociedad su vida, su diáspora, su integridad. Hombres y mujeres que defendieron los valores de la democracia aquí y en el exilio. Y los defendieron olvidando posiciones vengativas que nunca nos transmitieron. La equidistancia es una falsificación de la historia, una manipulación de la memoria, un abuso del olvido. En el caso español recordar tiene un gran significado, porque es desenterrar lo oculto. Primo Levi consideraba el olvido como una estrategia de las naciones por la que habían creído alcanzar el perdón. Pero no es así. El perdón se invalida cuando no se asume la existencia del pasado, sin arrepentimiento, sin resarcir los daños. Se impone un duro proceso de conquista de la memoria. Que nadie dude que el exilio es uno de los episodios más dolorosos de nuestra historia reciente. Como decía María Teresa León“Estoy cansada de no saber dónde morir”.

Miramos al futuro. Después de tanto sufrimiento, de tanto olvido, nos reconforta la próxima ley de memoria democrática, que en uno de sus capítulos dice: "Se declara 8 de Mayo el día del recuerdo y homenaje a las víctimas del exilio como consecuencia de la guerra civil y la dictadura".

Los republicanos españoles lucharon contra el nazismo en los frentes del Este y del Oeste de Europa. Es por ello que nos reunimos en este monumento para rendirles reconocimiento, indistintamente, el 8 o el 9 de mayo, porque fue la misma victoria. También nos reconfortan las recientes palabras pronunciadas por el Presidente de la República Francesa, Emmanuel Macron, ante nuestro Presidente del Gobierno, que dijo: “No olvidaremos nunca los numerosos republicanos españoles que se unieron a la resistencia francesa y nos permitieron mantenernos libres". En esa lucha, que hoy conmemoramos, murieron en Francia cerca de 35.000 españoles, luchando contra la invasión y la ocupación nazi.

No puedo finalizar estas breves palabras sin un recuerdo para México. Ese país que nos abrió las puertas de par en par. Y me gustaría asimismo recordar las palabras del Presidente Lázaro Cárdenas“A los que han luchado en su país, a favor del gobierno legalmente constituido no les vamos a ofender con un interrogatorio. Hay que recibir a todos”.

Seguidamente ha tomado la palabra la embajadora de México, María Carmen Oñate, en representación del cuerpo diplomático presente, quien ha recordado de esta forma la fraternal relación entre México y la República española:

“El México surgido de la Revolución de 1910 respaldó desde su nacimiento en 1931 a la II República Española, con la que estableció una cercana relación diplomática, cultural, económica y política. México encontró en España al país que le tendió la mano para ingresar a la Sociedad de Naciones, en cuyo marco México realizaría la más firme defensa de la República Española, denunciando la injerencia extranjera, la indiferencia de las democracias occidentales y el embargo impuesto a su legítimo gobierno. México desarrolló desde Ginebra acciones diplomáticas en defensa de la soberanía y de la libertad, de esa libertad con mayúsculas. México acogió al Gobierno de la República, con el que mantuvo relaciones a lo largo de cuatro décadas.

El Gobierno del Presidente Lázaro Cárdenas, que ya en 1937 había acogido a los 464 niños que más tarde se conocieron como Los niños de Morelia, no dudó en dar la bienvenida a más de 25 mil españoles que a bordo del llegarían a las costas de Veracruz entre 1939 y 1942.

En sus palabras de bienvenida, el entonces Secretario de Gobernación de México, Ignacio García Téllez, expresó: “No los recibimos como náufragos de la persecución dictatorial a quienes misericordiosamente se arroja una tabla de salvación, sino como a defensores aguerridos de la democracia republicana y de la soberanía territorial, que lucharon contra la maquinaria opresora al servicio de la conspiración totalitaria universal. El Gobierno y el pueblo de México les recibe como a exponentes de la causa imperecedera de las libertades del hombre”.

Precisamente, las palabras de la embajadora han estado precedidas por la lectura del poema “Entre España y México”, escrito por Pedro Garfias camino del exilio, a bordo del vapor “Sinaia”:

De acero fiel nos une y nos separa
con España presente en el recuerdo,
con México presente en la esperanza.
Repite el mar sus cóncavos azules,
repite el cielo sus tranquilas aguas
y entre el cielo y el mar ensayan vuelos
de análoga ambición, nuestras miradas.

España que perdimos, no nos pierdas;
guárdanos en tu frente derrumbada,
conserva a tu costado el hueco vivo
de nuestra ausencia amarga
que un día volveremos, más veloces,
sobre la densa y poderosa espalda
de este mar, con los brazos ondeantes
y el latido del mar en la garganta.

Y tú, México libre, pueblo abierto
al ágil viento y a la luz del alba,
indios de clara estirpe, campesinos
con tierras, con simientes y con máquinas;
proletarios gigantes de anchas manos
que forjan el destino de la Patria;
pueblo libre de México:
como otro tiempo por la mar salada
te va un río español de sangre roja
de generosa sangre desbordada.
Pero eres tú esta vez quien nos conquistas,
y para siempre, ¡oh vieja y nueva España!


Ha cerrado el turno de intervenciones el Secretario de Estado de Memoria Democrática, Fernando Martínez López, quien ha puesto en valor las razones por las que el pueblo español tiene un deber de memoria y una deuda con los republicanos españoles que tuvieron que exiliarse tras la guerra civil, que no fue una guerra distinta de la que luego libró el resto de Europa contra el fascismo:

“Su compromiso en la lucha por la libertad es un ejemplo para nosotros y para futuras generaciones. Es un ejemplo que pone el punto de mira en el corazón de la sociedad que queremos construir. Es un ejemplo de valores de solidaridad y de libertad que tienen que impregnar nuestra vida cotidiana. Y es un ejemplo, en consecuencia, de la contribución que ellos han hecho a los fundamentos de esta sociedad democrática que hoy vivimos. Por eso, no podemos olvidar. Nunca vamos a olvidar la lucha y el sacrificio de los hombres y de las mujeres del exilio republicano que lucharon por la liberación de Europa. Y no lo vamos a olvidar, entre otras cosas, porque ellos son los cimientos de la sociedad democrática que hoy vivimos. Gracias a ellos se enlaza aquella España democrática de los años 30 con esta España democrática a partir de los años de nuestra Transición y de la Constitución del 78. Gracias a su acción colectiva hoy podemos recordarles con emoción

Hoy es un buen día para celebrar este acto, porque están emergiendo de nuevo ideas totalitarias, de carácter neofascista y que están tomando visos de legalidad en espacios políticos de nuestro entorno. Es un día que tenemos que tener muy en cuenta y estar muy pendientes de este renacimiento totalitario y neofascista. Y tenemos la obligación de perseverar en la memoria en relación con las mujeres y hombres del exilio, de su legado y de sus enseñanzas. Tenemos que difundir las lecciones de la II Guerra Mundial y aquellos hechos dramáticos. La libertad, la democracia y el Estado de derecho hay que cuidarlas todos los días. Precisamente por la emergencia del pensamiento totalitario, es necesario que cuidemos esos valores de libertad. De libertad con mayúscula, no de otras libertades de las que se hablaba recientemente en Madrid. Los valores de libertad, de respeto, de solidaridad, esas virtudes republicanas tenemos que cuidarlas”.

El acto ha finalizado con un homenaje floral de los asistentes frente al memorial de las Brigadas Internacionales, en el que han depositado claveles rojos.

 MUNDO OBRERO REDACCIÓN  

 

 

 

domingo, 9 de mayo de 2021

 1.123.000 toneladas de fosfato expoliadas del Sáhara Occidental en 2020

 

Se estima que este año la empresa marroquí OCP se embolsará unos 171 millones de dólares por sus ventas ilícitas de fosfatos

 

La mina de fosfato de Fos Bucraa, en el Sáhara Occidental ocupado, es objeto del saqueo sistemático de la empresa estatal marroquí OCP S.A. Esta empresa se comporta como si fuese la dueña de la mina, cuando los saharauis nunca han consentido tal situación.

WSRW, organización que rastrea y denuncia el expolio de los recursos naturales del Sáhara Occidental, acaba de publicar su octavo informe anual de P for Punder (P de Pillaje). En él se documentan todos los envíos fraudulentos de roca fosfórica que partieron el año pasado de los territorios ocupados en dirección a empresas de seis países.

Erik Hagen, miembro del Consejo de WSRW, traducido por Mahfoud Bechri, ha ido señalando en una presentación on-line detalles sobre el expolio del fosfato.

En primer lugar ha puntualizado que la exportación desde la mina de Bou Craa causa un perjuicio muy importante para los saharauis, pero es de dimensiones ínfimas para Marruecos que tiene una gran producción en unos yacimientos inmensos en Marruecos.

La forma de trabajo para detectar el expolio, nos cuenta Hagen, es hacer un seguimiento de los barcos desde el origen, El Aaiún. Este año han sido 22 barcos. Cuando llegan a destino se descubre cuáles son las empresas que compran el fosfato saharaui. En la actualidad, los países que más importan son India –el mayor importador con diferencia-, Nueva Zelanda, Brasil, Japón, y, casi con seguridad, China y Filipinas.

En India, la empresa Paradeep Phosphates Ltd se lleva el 64% de las importaciones de Bou Craa. Esta empresa es propiedad del Gobierno de Marruecos, de un grupo indio y del Gobierno de India.

Comenta Hagen que el Gobierno de Nueva Zelanda tiene una actitud muy positiva con respecto al Sáhara Occidental y que está esforzándose por que las dos empresas expoliadoras –Ravensdown y Ballance Agri-Nutrients, que alcanzan el 20,4 de las exportaciones- busquen otras vías de importación que no sean el Sáhara Occidental. Se puede importar del propio Marruecos, que, como ya se ha dicho, tiene grandes yacimientos de fosfatos. Para cambiar de importador, nos dice, tendrían que hacer determinadas inversiones ya que, al cambiar el país, cambia el producto y el procedimiento de producción. Aunque el Gobierno desea que cesen estas importaciones fraudulentas, todavía no está apoyando estas inversiones financieras. Un argumento para hacerlo sería que los Principios Rectores sobre las empresas y los derechos humanos de la ONU piden a los gobiernos que ayuden a las empresas a respetar los derechos humanos.

En este momento ha caído el número de empresas importadoras y por lo tanto pocas son las empresas a las que dirigirse para pedirles el fin de ese tráfico ilegal. Por eso dice Hagen que hay que centrarse en los proveedores que facilitan el expolio in situ. Dos de estas empresas ya no mantienen contratos con Marruecos para los territorios ocupados del Sáhara Occidental. Una es Continental, la empresa alemana que proveía cinta de caucho para la cinta transportadora de Bou Craa. La otra es la compañía sueca Epiroc, antigua Atlas Copco, que proporcionaba equipos de taladro para la mina.

Hagen ha nombrado a la empresa Siemens-Gamesa que viene entregando, instalando y dando servicio a turbinas eólicas en el Sáhara Occidental ocupado.

Considera Hagen que hay un grave riesgo de que Marruecos exporte energía renovable obtenida en el Sáhara Occidental hacia la UE en el futuro.

Nos comenta, por último, que, no necesariamente hay que dirigirse a los gobiernos, sino a las empresas, haciéndoles ver el interés para su imagen y para el derecho en dejar de importar productos expoliados del Sáhara Occidental.

Las empresas que compran fosfato del Sáhara Occidental ocupado militarmente por Marruecos están infringiendo la ley internacional, colaboran con la ocupación de un territorio sobre el que Marruecos no tiene soberanía, y obstaculizan la resolución del conflicto.

CRISTINA MARTÍNEZ BENÍTEZ DE LUGO 

domingo, 2 de mayo de 2021

 ¿Habrá guerras por el agua?

 América Latina es el objetivo imperial en su ambición por este recurso

 

De acuerdo con un informe de la Unión de Trabajadores de la Tierra (UTT) de Argentina, citado por el portal Resumen Latinoamericano, según el Censo Nacional 2010 en ese país “5,3 millones de personas no tienen acceso al agua potable dentro de su vivienda y cerca de 1 millón no la tiene en el perímetro de su terreno”, lo cual significa que el 13% de los habitantes están imposibilitados de contar con agua en sus hogares.

El mismo informe señala que las causas de dicha situación hay que encontrarlas en el Cambio Climático, las modificaciones en los usos del suelo y el aumento del extractivismo, todo lo cual influye negativamente en la vida de los ciudadanos en general y de los trabajadores que necesitan el agua para realizar sus labores. Los habitantes de algunas zonas rurales deben pagar ocho veces más que los de las urbanas y a veces incluso caminar muchas horas para obtener el agua necesaria a fin de solventar las necesidades mínimas para la vida.

En Chile, recientemente se ha denunciado que Fuad Chahín, candidato a la Convención Constitucional y presidente del derechista Partido Demócrata Cristiano -que fue el principal promotor del golpe de Estado contra el presidente Allende, propagandista de la dictadura en sus primeros años y usufructuario protagónico de la pos dictadura- ha utilizado sus conexiones dentro del poder para salvaguardar intereses familiares, promoviendo leyes para que sus allegados tuvieran acceso privilegiado al agua, violando la ley que supuestamente juró defender. En su época de parlamentario, Chahín votó en temas vinculados a intereses propios o de su clan, si se considera que algunos de sus familiares directos, además de ser dueños de gran cantidad de derechos de agua en la comuna de Curacautín en la región de la Araucanía al sur de Chile, poseen superlativos intereses en la generación hidroeléctrica de la región.

Estos son solo dos ejemplos recientes que expresan la paulatina conflictividad surgida de la imposibilidad de que importantes sectores de la población tengan acceso al agua. Tal vez esto es lo que llevó a que la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, el pasado 7 de febrero haya manifestado en tono amenazante que “durante años las guerras se han peleado por el petróleo pero en poco tiempo serán por el agua”.

Para Estados Unidos la guerra es un recurso

Aunque se estaba refiriendo a una problemática local de su país en la que reconocía “desigualdades en el acceso”, se debe considerar el significado que la palabra “guerra” tiene cuando es mencionada por la segunda figura de la administración del país más poderoso, agresivo y belicista del mundo.

Hay que recordar que el agua dulce solo representa el 2,5% de los 1.386 millones de kilómetros cúbicos de reservas de agua que hay en el mundo. El 70% corresponde a polos y glaciares y otra cantidad significativa se encuentra en ríos no potabilizados.

Los pueblos de todas las latitudes y longitudes del planeta conocen ampliamente lo que ocurre cuando Estados Unidos tiene falencias en sus reservas de algún recurso o cuando se producen insuficiencias internas que no permiten garantizar el consumo cotidiano. De la misma manera, se sabe mucho acerca de las formas y métodos que utiliza para obtenerlos. Si la presión, el chantaje, las amenazas, las sanciones, los bloqueos y los asesinatos de líderes no funcionan, recurren a la guerra, esta vez anunciada de antemano por la vicepresidenta Harris.

Aunque parezca increíble que la carencia de agua sea causa de conflicto y guerra, es casi tan antiguo como la propia sociedad. Michael Klare, en su obra Guerras por los recursos / El futuro escenario del conflicto global, nos recuerda que ya en el Antiguo Testamento se señala que, ante la incapacidad de los israelitas para entrar en los fértiles valles del Rio Jordán sin antes expulsar a sus habitantes, Dios les instruyó que entraran a esa tierra toda vez que él se encargaría de expulsar a los pueblos autóctonos que la poblaban. Posteriormente le ordenó a Josué -sucesor de Moisés- que cruzara el Jordán y exterminara a “los habitantes de Jericó y otros asentamientos de la zona”.

La pelea por el Nilo

Son innumerables a través de la historia los hechos de guerra vinculados al agua. En fechas recientes se ha estado agudizando un conflicto de dimensiones insospechadas entre tres países (Egipto, Sudán y Etiopía) de los once que se encuentran en la cuenca del río Nilo, el mayor del mundo.

El río Nilo tiene dos fuentes principales: el Nilo Blanco que aporta el 20% y el Nilo Azul que representa el 80% de sus aguas. Este último tiene su nacimiento en el Lago Tana en Etiopía y fluye hacia el norte en dirección a Sudán y posteriormente a Egipto para luego desembocar en el Mar Mediterráneo.

En 2011 Etiopía inició la construcción en el Nilo Azul de la Gran Presa del Renacimiento Etíope -la más grande de África- sin que previamente se llegara a un acuerdo con los dos otros países que aguas abajo también son subsidiarios del río. No obstante, en 2015 se firmó un acuerdo entre los tres por el que Etiopía se comprometía a no afectar la disponibilidad de agua de Sudán y Egipto. Pero, en fechas recientes, variadas desavenencias entre las partes aumentaron la tensión amenazando con echar por la borda la colosal obra.

El vínculo de Egipto con el Nilo es histórico y fundamental ya que el río fue el sustento principal para erigir una gran civilización en la antigüedad, lo cual ha signado parte importante de la vida del país y de su diplomacia en el último siglo.

Desde 1902, Egipto viene realizando acuerdos internacionales encaminados a apuntalar su posición dominante sobre el Nilo, lo cual no es del agrado de Etiopía ni de Sudán. En un artículo titulado Las guerras del agua / Egipto, Sudán y Etiopía, publicado en el portal Rebelión por el analista especializado Germán Romano, el autor recuerda que Butros Butros-Ghali, ex Ministro de Relaciones Exteriores de Egipto, en una entrevista con la BBC expuso la posición de su país en relación al Nilo: “La próxima guerra en Oriente Medio se librará por el agua”. Posteriormente debió modificar su punto de vista al asumir como Secretario General de la ONU entre 1991 y 1996, favoreciendo la cooperación como forma de hacer un aprovechamiento óptimo para todos los involucrados con el gran río. Así, Butros-Ghali antecedió a la actual vicepresidenta de Estados Unidos en su percepción de la conflictividad que la carencia de agua puede generar en el sistema internacional.

En el artículo mencionado, Romano apunta que “en caso de un conflicto armado entre estos países, las consecuencias recaerán sobre las poblaciones que sufren los efectos de gobiernos que no son elegidos por el pueblo y está en riesgo el acceso sin distinción de fronteras para el riego utilizado en la agricultura”.

También en Irak y Libia

Desde este punto de vista, no debe entenderse como casualidad estrictamente vinculada a la riqueza energética que se hayan producido las intervenciones militares de Estados Unidos y la OTAN en Libia e Irak. En el caso del país africano, bajo su desierto se encuentra uno de los mayores reservorios de agua de todo ese continente. El interés en explotar y distribuir el líquido en amplios sectores de la población se transformó en la obra estratégica de mayor alcance del gobierno de Muamar Gadafi que logró hacer una revolución verde en las arenas del Sahara, convirtiendo su país en un gran vergel que posibilitó acceso al agua y alimentos a grandes sectores de la población, llevando al país a ser el de mayor Índice de Desarrollo Humano (IDH) del continente.

En Irak, la confluencia de los ríos Tigris y Éufrates fue el sustento para que se originara la civilización mesopotámica que tanto brillo y tantos avances dio a la humanidad en materia de ciencia y tecnología. Esa riqueza, además de sus grandes reservas petrolíferas y gasíferas, constituyó el eje de la ambición imperial que motivó la invasión a ese país en 2003.

De manera tal que llega tarde el anuncio de la vicepresidenta Harris. Por si no lo sabe, su país ha sido protagonista de crueles incursiones en países dueños de grandes existencias de agua a las que los tentáculos imperiales también han querido echarle mano. América Latina debe tomar nota de esta nueva amenaza bélica. Poseedora del acuífero guaraní en los confines de Argentina, Brasil y Paraguay y las cuencas del Amazonas, el Río Negro y el Orinoco, donde se concentran parte importante de las reservas de agua dulce del planeta, nuestra región es objetivo fundamental del interés imperial en un elemento vital para la vida en el planeta.

SERGIO RODRÍGUEZ GELFENSTEIN. Magíster en Relaciones Internacionales por la Universidad Central de Venezuela; Doctor en Estudios Políticos de la Universidad de los Andes